jueves, 9 de septiembre de 2010

Desgastada, putamente desgastada es lo que estoy.


Me suelo identificar un poco con lo que la sabiduría popular denomina una mujer de armas de tomar. Si quiero algo, pues voy y lo consigo. punto. -o, cuando menos, lo intento-.

Nada de quedarse esperando al príncipe azul o al dios que provea.

Así, las cosas que quiero pero escapan de órbita de control, me generan altísimo estrés; ansiedad que llevo bloqueando los últimos seis meses, tiempo en el que enviare mi candidatura al máster que me llevaría a europa y al lado de R.

Hace 80 dìas (lo sé porque los conté) me informaron que mañana pondría fin al limbo que me encuentro. Incertidumbre que no permite realizar actos cotidianos como cortarme el pelo y, mucho menos, elaborar planes a largo plazo.

Viviendo el día a día, con un ojo puesto en el 10 de septiembre, eso es lo que he estado haciendo yo.


Ahora, cuando ya no puedo dormir en paz e ingreso a mi boca todo lo que se pasa por el frente... me entero que aplazaron la fecha límite para presentarse al master.


y yo que aspiraba a respirar tranquila mañana, triste o feliz, pero tranquila.. sin esta ansiedad que me está corroyendo. desgastando.

y, por si la incertidumbre fuera cosa de poca monta, el hecho de que aplacen las fechas significa menos tiempo, del ya de por sí muy escazo, para pedir mi visa y llegar a tomar clases en un idioma no del todo bien conocido.


quisiera sedarme y dormir, un rato largo.



para las interesadas, nueva fecha, 17 de septiembre.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De este viernes en ocho.

Estaré revisando.

Un abrazo. Siempre pendiente de ti.

P.D. Si por allá llueve, por acá no escampa. Será por eso que todos tenemos tanta gripa.

Anónimo dijo...

De este viernes en ocho.

Estaré revisando.

Un abrazo. Siempre pendiente de ti.

P.D. Si por allá llueve, por acá no escampa. Será por eso que todos tenemos tanta gripa.

Luna Roi dijo...

Pi... ¿lo de Ye? Ye, ¿dónde verte?

Te (os) quiero:

L.