Autoanálisis.

Pienso por sistemas. Creo clasificaciones y conexiones de manera automática. Los elementos no taxómizados me exasperan.

Llego, observo y clasifico. Siempre... y, sí hay algo de confianza, pregunto por los objetos por fuera del aparente sistema:

Sí esa estantería está dedicada a bottelas de whiskey, por qué, en medio de todas las botellas hay una tarro de papas?

Cómo podrán imaginar, mi computador está lleno de carpetas, sub carpetas y sub sub carpetas... también podrán deducir que mi forma favorita de enumeración es 1., 1.1, 1.1.1, 1.1.1.1...

Sí algo queda por fuera, pues ya dice la teoría de sistemas que no existe el sistema perfecto, sólo hay dos opciones: eliminar el objeto rebelde o crear una clase completa de "rebeldes".

Así, en mi biblioteca de música no existe la carpeta "miscelánea", "otros" ni "no-clasificable"... sí eres un pobre track suelto por ahí, único en su género, estás destinado a desaparecer o dejar de ser único.

Las personas también van al sistema, nada se salva... creo que por eso sigo peleando con mi hermana, y no me he resignado que ella es así y ya está. Porque, en mi sistema, un persona con la (gran) capacidad intelectual de ella y tan buena en lo que hace, queda en un grupo mientras que, la persona con algunas acciones que tiene va en otro... pero es mi única hermana. Así que no es viable la eliminación del elemento problema... continuaré con mi piedra en el zapato.
Asumo que os estareís imaginando un armario con camisas rojas a la izquierda, azules a la derecha en orden de frecuencia de uso (muy al Sheldon's mode). Pero no, tener un sistema en la cabeza, no significa estar en la capacidad de cumplirlo. Sé que esas botas de agua verdes que ahora mismo adornan el centro de mi cuarto, van en el tercer espacio de la primera columna de la puerta izquierda del armario, pero muero del tedio de llevarlas a su lugar, seguirán entoces fungiendo de florero.

y, para suavizar la neura que os estás imaginando, les cuento que es muy útil pensar así... y por eso me va tan bien en éste trabajo porque, del caos que crean 20 testimonios y 5 examenes periciales (que lo sepan, aún sin que medie intención de mentira, TODOS percibieron algo diferente, nunca obtendrás dos versiones exactamente iguales), logro ver el sistema y relacionar lo que dijo b con lo que dijo z y que, a su vez, aparece reflejado en el informe 345 de balística... entonces, armo el rompecabezas que es, al fin y al cabo, lo que hace el juez penal... armar el rompecabezas y saber como fue que terminó ese muerto ahí.

Abrazos,