Ingredientes:
- Una libra de camarones congeladísimos. Sí, siempre se me olvida descongelar con tiempo las vainas.
- Un tomate.
- Medio pimentón hallado en la nevera semi-seco.
- Limón.
- Sal.
- Restos de crema de leche de la semana pasada.
- Azúcar.
- Muchaaaaaaa mantequilla.
- Masa para pancakes, crepes y waffles de Aunt Jemina.
Otros requerimientos:
- Lluvia torrencial que impide domicilios.
- Desparche propio de domingo pasado por gripe en casa.
- Inspiración. Bach por Isthak Perlman tocando el Concierto para violín en A menor. trés importante.
Instrucciones.
Cuando logre sacarse el sueño de encima y ser persona - debidamente presionada por su estómago vacío- pase por el baño, lavése las manos, agua en los ojos y recójase el pelo - máxime si la comida será degustada más allá de su grupo familiar-.
Raspe la nevera, alacena y aledaños y disponga sobre la mesa de la cocina todos los potenciales ingredientes que logró encontrar. Deseche lo que exceda los límites de un estómago moderadamente tolerante.
Divida entre dos los ingredientes e instrucciones para diez crepes -pues sólo comerá usted-. Respecto al huevo, resignese, 1/2 supera las posibilidades de división. Busque el más antiadherente sartén que tenga. Vierta mucha mantequilla y esparza una fina capa de mezcla de crepes. Ojo: Fina!! delgada! leve!.
Cuando se de cuenta que su crepes tiene más de un centímetro de espesor y que se está quemando por un lado mientras sigue crudo por encima. Anótese un punto negativo.
Cuando se le desbarate en pequeños trozos y se le queme ligeramente por el lado contrario.. otro punto negativo.
Entretanto, ponga a calentar agua con el fin de descongelar los gélidos camarones. Cuando hierva, viértalos y, por favor, no se olvide de ellos, que, después hierven, pelean por salir de la olla y pueden caer gotas indeseadas en el sartén que reposa al lado dónde está haciendo los crepes.-1 un punto.
Una vez armado el rompecabezas en que derivó su circular crepes, proceda con la salsa.
Sí sospecha de que un tomate y medio pimentón semi seco es insuficiente para hacerla, creáse!. Sí no se creyó, por favor no ensucie el nuevo super-aparato-hace-zumos-en-dos-pasos-que-anuncian-en-tv. Es aparatoso, requiere el lavado de mil piezas, y desperdicia la mitad de su único tomate y su medio pimentón semi seco.
Sofría ligeramente en mantequilla los camarones -sofría, no tueste!-, agregue el zumo de tomate y pimentón, sal, el resto de crema de leche, azúcar y deje espesar. Sí, que el limón es esencial en la cocina, pero una libra de camarones NO requiere de tres limones, sólo un ligero chorro. Y, sí se pasó con el limón, no intente compensar el ácido, con tres cucharadas de azúcar (...).
Cuando se aburra de esperar a que espese, apague y sirva sobre el puzzle-crepes. Agregue sal y coma.
Y, sorpréndase, los camarones tostados acaramelizados en salsa de limón con reducción de pimientos, quedaron ricos.
Por último, antes de que le entre el tedio, llene el lavaplatos con toda la loza que ensucio -que, por cierto, no cabe- y proceda a lavar.
Anótese tres puntos negativos más. Uno por dejar pasada por agua la cocina. Otro, por tomar un segundo baño y el último, por olvidar limpiar previamente las cosas y taponar el sifón.
y diez positivos por el esfuerzo y el sabor.
Bon apetit!
2 comentarios:
jjiij :)
Poco sensible con el medio ambiente te veo... ¡tanta agua!
A veces he pensado dedicarme a la cocina, pero siempre se me pegan las sábanas, suelo estar medio empanada y normalmente salgo escaldada de mis relaciones... no me veo muy cordonbleu!
Besitos, Pi, cariño.
Publicar un comentario