Ayyy... qué díficil está resultando hoy... tengo síndrome de domingo, sé que es festivo, pero da igual. Los festivos pasan por domingos.. es raro, poco sufro de dominguitis. Usualmente me ocupo de dormir, estudiar violín, leer, seguir durmiendo.

Pero hoy es de esos días que sólo sirven para tener un cuerpo calientico al lado, para abrazarlo entre siestas, para abrazarlo entre comidas... y no hacer nada, pasar el día holgazaneando por ahí en compañía.

Ganas insufribles de abrazos, de mimos, de halagos.. trato de engañarme apretando con fuerza un muñeco simpático hurtado de la cama de mi madre.. y, claramente, no funciona. Igual, no dejo de apretarlo con fuerza.

Y trato de dormir, pero es imposible dormir más... el sol agobia incluso a través de las cortinas pesadas, el regueaton de mi hermana compite con éxito frente a la música del festival de verano.. me da pereza si quiera ponerme unos audífonos y escapar de él. Me da pereza pararme y estudiar. Pereza de pararme y salir.

La extraño a ella, claro que la extraño!... pero tengo un extrañamiento a un nivel superior, a nivel abstracto. Extraño a alguien. Extraño se el plan A de alguien, abrazar a alguien, besar a alguien, ser querida por alguien, pasar este día en la cama con alguien.

Siento, a veces, que tengo acá agotadas las posibilidades. Que he de acostumbrarme de nuevo a mi vida sin alguien... vida que, en general, me gusta, disfruto pero a veces me supera, me sobra.

Hoy no se observa la sensación de poder, de posibilidad. No se observa euforia. Se observa un estado apático, abúlico, resignado... no salta, no baila, no canta, permanece en cama.

LLegué hace menos de una semana y parecen meses... parece que en un tiempo demasiado lejano, dormía desnuda, tomábamos un caña mirándonos aletargadas frente a frente, agobiadas por el calor. Un tiempo demasiado lejando de recorrer museos, de decidir en una lista el qué hacer ese día, de fumar pitillos al descanso, de exasperarme con Antonio, de divertirme burlándome de él... por el contrario, eso días fueron horas y el mes días.

Qué jodido, qué jodido volver a los colores después de pasearse en rosa. Hoy he caído en el gris.