miércoles, 18 de julio de 2007

Hace unos años, escribí como ficción: "Francisca! ¡Francisca! Yo escuchaba mi nombre una y otra vez, sabia que era mi padre el que me llamaba pero, no quería escucharle, no quería levantar la cabeza y ver esos ojos azules, fríos, distantes, inquisidores. Siempre me había dado miedo mirarlo, nunca había logrado sostenerle la mirada concentrándome fijamente en sus ojos."... Hoy fuí Francisca, agaché la cabeza, encorvé los hombros, me encongí hasta sentirme de un tamaño infantil, abrí los ojos lo más que pude, y mirando desde abajo dije, con un hilo de voz: -se me quedó.

...................................................................

5 comentarios:

Fiorixk dijo...

Y qué se te quedo?

Pi dijo...

.. la orden médica para las fisioterapias (una bobada teniendo en cuenta lo "lejos"que vivo de la Cruz Roja)

Josefa dijo...

sentí tu angustia pequeña... nos torturan por tan poco

VICA dijo...

Sabes de quién me acordé? del gato con botas de Shrek... así, de la nada.

Pi dijo...

Vica:

jeje... ni tan así de la nada... sabías que mas de una vez me han dicho que me parezco a ese gato? (más si me ven en situación de puchero+ojo lloroso)

Saludes